Qué es el branding y por qué es importante.

Qué es el branding y por qué es (lo) importante

Quizá esta no sea la mejor manera de comenzar, pero hay que ser honesto. Si eres un profesional del marketing o trabajas en una agencia de marketing y comunicación, en esta entrada de blog no vas a encontrar nada que no conozcas.

Sin embargo, si tienes una empresa que se plantea, o incluso comienza a convencerse, de que la comunicación y el marketing ha cobrado una nueva dimensión en la estructura de tu compañía, lo que vas a leer a continuación puede llegar a interesarte e incluso a ayudarte a tomar la decisión de contar con el apoyo de una agencia de comunicación y marketing que te apoye a desarrollar el branding, la construcción de marca y las acciones para dar visibilidad a tu empresa.

Es posible que todos tengáis en la cabeza un concepto de branding: un logotipo, una marca, el nombre de la empresa, el de un producto o servicio, las acciones de publicidad o marketing… Pero el branding es mucho más, y posiblemente sea lo más importante para conseguir alcanzar el objetivo que nos hayamos marcado.

Comencemos con una de las definiciones de branding. El branding no es una acción, sino una estrategia basada en un plan de acciones a desarrollar a largo plazo para la construcción de una marca sólida que tiene como fin último alcanzar un objetivo específico: conseguir ser relevante ante nuestros clientes dando a conocer la visión y los valores diferenciadores de nuestra empresa con respecto a la competencia y llegar a la fibra, al corazón, hacer sentir esa marca.

Sí, es cierto. Hay unos elementos que podemos considerar como las claves del branding. A saber (hay más):

– El naming o elección del nombre con el que nuestra empresa o marca se va a presentar en el mercado.

– La identidad corporativa o la representación física de la marca: diseño, logotipo, tipografía, colores… En este punto podríamos incluir también el tono con el que nos comunicamos con nuestro público (un mismo mensaje deberá tratarse con tonos diferentes -informal, corporativo…- dependiendo del canal de comunicación que vayamos a utilizar y del espacio, online y offline).

– El posicionamiento o proceso para conseguir ubicar nuestra marca en la mente de los consumidores sean nuestro público objetivo o no. Es decir, la asociación de la marca a algo por lo que quiere ser reconocida (hay que tener en cuenta que esta labor no tiene que ser únicamente hacia el exterior, sino que también debe ser parte fundamental en la comunicación interna de la empresa).

El claim o mensaje que recogerá el concepto que engloba lo que hacemos, lo que queremos comunicar, lo que queremos que sientan nuestros clientes, el que nos va ayudar a realizar la narrativa, el storytelling, la historia que tenemos que contar y nos acompañará a presentar la empresa, marca, servicios y propuesta de valor.

Y un elemento clave que resume toda una estrategia de branding: la relación emocional entre los clientes y nuestra marca o empresa. Es decir, la experiencia que los clientes o potenciales clientes tienen con nosotros, y que es el resultado de cómo gestionamos y trasladamos la misión, los valores y la visión de la empresa en la relación que mantenemos con ellos. Unos activos intangibles que son los que construyen nuestra reputación, nuestra marca.

Muchas veces el cliente no compra un producto o servicio, compra una experiencia, un valor, sentir ser parte de esa marca, tanto le ha llegado el mensaje que quiere comprar determinada marca, pertenecer a esa historia, eso es Branding.

Sostenibilidad, innovación, inclusión, originalidad, diferenciación relevante, emoción y conexión… se presentan hoy como las líneas más eficaces y efectivas en la comunicación y el marketing. Pero deben trasladar y representar de “verdad” la visión, los valores y la misión que asume la marca o empresa con la sociedad. De esta forma, y solo de esta forma, la experiencia del cliente con nosotros será positiva y plena.

Share
Call Now Button